Me pican los ojos. Y me lloran. Y el izquierdo se me ha hinchado como un globo.
También se me han hinchado los pies. Y me han salido ampollas. Me he puesto tiritas de esas modernas que ahora se llaman apósitos, con analgésicos y mulliditas.
Tengo que perder al menos seis kilos en un mes para que me quepa uno de los vestidos de ir a fiestas que hay en mi armario, y no tener que comprarme otro. Tengo hambre. Odio las comuniones de las narices. Además, el padre de la criatura es ateo. ¿Por qué cojones bautiza y comunioniza a sus hijos un ateo? ¿Qué mierda de convicciones son esas?
Aún quedan tres meses para mis primeros once días de vacaciones. Y tengo que pasarlas estudiando para que ningún enchufado de mierda (sí, otra vez) se quede con la plaza que quiero.
Al menos, este año tengo cinco días de fiesta por semana santa.
Y creo que esta entrada acaba de darme el título de Amargada del Año, pero, ¿os he dicho ya que tengo hambre?
PD: Actualizo, ahora que he almorzado y se me ha pasado el hambre:
¿Os acordáis de Alcatraz? Pues hay nuevas noticias. Yo lo flipo...
Y el contestador del Mediterráneo, esa fuente inagotable, nos trae este estremecedor testimonio:
No sé por qué la señora esperaba que la pista de aterrizaje para extraterrestres que tenemos en esta santa ciudad fuera "bonita". Se ve que la campaña de promoción turística de nuestro Excelentísimo Ayuntamiento comienza a dar frutos...
PD: Actualizo, ahora que he almorzado y se me ha pasado el hambre:
¿Os acordáis de Alcatraz? Pues hay nuevas noticias. Yo lo flipo...
Y el contestador del Mediterráneo, esa fuente inagotable, nos trae este estremecedor testimonio:
TURISTA
Soy una vecina de Burgos. He venido a pasar una semana de vacaciones a la provincia de Castellón y hay muchos pueblos que me han encantado y que son preciosos. También me he quedado fascinada con las montañas que hay y la variada y bonita vegetación que tienen. Y los parajes naturales que hay son increíbles, tanto el Desierto de las Palmas, la Serra d’Espadà y otros tantos. Pero me ha sorprendido mucho y negativamente la plaza Mayor de Vila-real, me la esperaba más bonita.
No sé por qué la señora esperaba que la pista de aterrizaje para extraterrestres que tenemos en esta santa ciudad fuera "bonita". Se ve que la campaña de promoción turística de nuestro Excelentísimo Ayuntamiento comienza a dar frutos...