miércoles, 18 de julio de 2012

Macondo, mon amour.

Ya lo he dicho alguna vez por estos lares. Vivir en esta santa provincia es como vivir en el más delirante sueño de un autor de realismo mágico puesto hasta las trancas de alucinógenos. Tenemos el increíble caso de la biblioteca sin libros, y el no menos increíble caso del aeropuerto sin aviones, pero con animalitos.

Pero ¡albricias, hermanos! Por fin ha llegado un avión a nuestro glorioso aeropuerto. Sí, hasta la servil y genuflexa (siempre he querido escribir esto) prensa local se cachondea ya de "el abuelito" (cómo se nota que acaba de retirarse).

Y para finalizar esta mini-entrada, he llegado a la conclusión de que hay alguna sustancia extraña en el sillón del despacho del Alcalde de Vila-real que hace que quien posa su trasero en él se vuelva un poco... tróspido. Por decirlo educadamente.

Si no, a ver cómo se explica esto.

Para entender la barbaridad de la idea, solo hay que ver lo que es la N-340. Esto es lo que nuestro Excelentísimo Ayuntamiento pretende "desnacionalizar".

Cómo se nota que sabe que los del Gobierno Central no le van a hacer caso.

2 comentarios:

  1. Después de lo que hemos visto en lo que va del verano, creo que cualquier cosa que pueda pasar en cualquier autonomía no va a sorprender.

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    1. Para decirte que lo que más me ha sorprendido ha sido el titular irónico del "Mediterráneo"... Me lo esperaba de cualquier periódico menos de ellos.

      Qué gracioso, alguien considera esta entrada "caca". Me pregunto si será un fan del "abuelito" o de mi Excelentísimo Alcalde.

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